Vuelvo a tomarle la mano. Será un buen día, un día espléndido. Un día mágico. No puedo evitar sonreír.

Una vez
había estado enamorado;
de eso estaba seguro.
Sólo una vez,
una única vez,
mucho tiempo
atrás.
Y aquella experiencia
lo marcó para siempre.
El amor perfecto
deja huella,
y el suyo había sido
perfecto

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